La ruta del Lago Ness

No hay viaje a las Highlands que se precie sin una buena ruta por los alrededores del Lago Ness. Y es que este lago entre la belleza de sus paisajes rodeados de naturaleza y el halo misterioso que envuelve  a su querido monstruo sigue atrayendo nuevos visitantes cada año. Creas o no las historias de Nessie, no serás capaz de mirar la superficie del lago sin preguntarte ¿y si aparece hoy?

En uno de los extremos del lago tenemos la pequeña ciudad de Inverness. El lago Ness en realidad es de agua salada y es aquí donde tiene su salida al mar, en forma de río. Uno de los mayores atractivos que ofrece la localidad es precísamente recorrer la orilla del río hasta las Islas del Ness, comunicadas con puentes. Inverness tiene también un castillo, aunque no se puede visitar por dentro hay muy buenas vistas desde sus jardines. Desde Inverness se pueden realizar cruceros por el lago y por el estuario de Moray para ver delfines y focas.

Por el lado oeste del lago, la carretera A82 recorre su ribera hacia el sur pasando por la población de Drumnadrochit, donde se encuentra el Loch Ness Centre & Exhibition. Es el lugar apropiado para conocer toda la historia sobre los avistamientos de Nessie y los estudios que se han realizado en el lago en busca del popular monstruo. El centro tiene varias salitas con proyecciones, todo en inglés. En mi opinión a este sitio se le podía sacar mucho más partido, resulta un poco aburrido para los peques, deberían hacerlo más interactivo y con más fotos y maquetas, pues tanta proyección al final se te hace un poco pesada. Al ladito del centro hay una charca con un Nessie de juguete, como decía Indira.

Desde Drummnadrichit también salen cruceros en el lago para buscar a Nessie. En este pueblo además se encuentra el restaurante Fiddler’s, uno de los mejores de las Highlands, donde nosotros comimos de lujo durante nuestro viaje. Sirven cervezas de destilerías locales y  cuentan con una colección de más de 500 botellas de whisky que decoran las paredes del local y su carta de bebidas. Pero lo mejor de este pintoresco restaurante es su comida. Aquí probamos el mejor haggis de toda Escocia y un delicioso salmón. Merece la pena llegar a los postres, para chuparse los dedos.

Si seguimos hacia el sur enseguida nos topamos con el Castillo de Urquhart, de visita obligada para los amantes de la edad media. Aunque está en ruinas sigue manteniendo gran parte de su encanto y ofrece unas fantásticas vistas del lago Ness desde el promontorio donde se sitúa. Este castillo, testigo de la guerra de la Independencia Escocesa y de sucesiones entre clanes, fue en su día uno de los más grandes de Escocia.

Y en el otro extremo, al sur del lago se ubica Fort Augustus, otro buen punto como campo base para explorar la zona donde además podréis ver las 5 esclusas del Canal de Caledonia y también desde aquí zarpar en un crucero por el lago.

Se puede hacer esta ruta en un día o en un par, para disfrutar tranquilamente de la naturaleza que envuelve al lago. Aunque parezca mentira, a nosotros el crucero por el Lago Ness nos quedó pendiente en nuestro #GulliverInScotland, así que tenemos una muy buena escusa para volver a las Highlands.